Cómo viajar en grupo y no morir en el intento

Cómo viajar en grupo y no morir en el intento

Compartir tus vivencias con los amigos. Disfrutar de las risas con los tuyos. Organiza tu viaje en grupo y disfrutarás el doble.

Cuando uno se decide a organizar un viaje lo hace con gran ilusión y con la idea de disfrutar del destino que haya elegido para pasar unas buenas vacaciones. Pero a veces, cuando el viaje se organiza a lo grande y hay muchos que se suman a ese placer de viajar, si no está bien preparado puede llegar a chafarse la fiesta. Como eso no quieres que suceda lo ideal será que sigas unos sabios consejos para que todo salga a pedir de boca y la maleta vuelva a casa cargada de buenos recuerdos y fotos bonitas de unas vacaciones al completo.

Friends holiday in Norway at beach stock image - Photo by Vidar Nordli-Mathisen


Antes Del Viaje


1) Destino a gusto de todos

Para emprender un viaje con la sonrisa puesta en todos los miembros del grupo lo ideal será elegir un destino a gusto de todos. De nada sirve que unos cuantos del grupo estén felices de haber escogido ese destino que tanto soñaban si el resto está en desacuerdo. Seguramente al principio hayan aceptado y pasarán por el aro, pero si hay algo que no sale según lo previsto, de su boca saldrá el tan temido “te lo dije”, ese que muchas veces nos da pavor escuchar y que pone la puntillita al día.


2) Dónde alojarse

El alojamiento del destino es otro de los puntos importantes a añadir en la lista de ideas para que todo marche sobre ruedas en unas vacaciones en grupo. Lo ideal es elegir una casa con muchas habitaciones, que cada uno tenga su espacio e intimidad a la hora de descansar, de poder ducharse y de acoplar su ropa.

Si hay que compartir una o dos habitaciones entre muchos, el caos será monumental, el desorden se apoderará de la estancia y todo acabará por los aires. Si la casa que se escoja tiene más de un baño también ayudará, con más de un baño no se organizan colas de espera, no se agobia al que está dentro y se prepara uno antes.


3) Cada uno una tarea

Delegar es otro de los pasos que resultan 100 % efectivos. Que cada miembro o pareja del grupo se encargue de algo, no siempre debe pringar el mismo. Al que se le dé bien el tema de la cocina que sea el cocinero oficial del grupos si se piensa cocinar en casa, si hay a otro que le gustan los mapas que sea el encargado de organizar las rutas… Que cada uno aporte su granito de arena, así no habrá uno que esté a tope de trabajo y otros mirando y además todo sentirán que han participado del viaje.


Durante el viaje


1) Empatía

Una vez instalados todos en el lugar de destino toca ahora disfrutar del lugar. Es imprescindible saber que vas en grupo y empatizar con él. Te preguntarás ¿esto qué quiere decir? Pues muy sencillo, lo que no quieras que te hagan no lo hagas tú, por eso si tú no quieres tener que esperar a otros, no llegues tarde. Es decir, en un grupo es imprescindible la puntualidad para que todo vaya rodado. La comprensión también es fundamental, y es que si alguien necesita algo en algún momento puntual, ha tenido un descuido o requiere hacer alguna compra de primera necesidad hay que entenderlo, por eso hay que saber comprender y escuchar.


2) Tener un líder

También es indispensable tener un líder, aunque cada uno lleve una función dentro del grupo, un coordinador es fundamental para repasar quién falta, saber dónde hay que ir, tener todas las horas de las excursiones o los lugares a visitar en orden y poner al grupo en marcha a la hora de ponerse a funcionar. Eso sí, el líder del grupo debe ser elegido entre todos, nada de autoproclamarse líder, porque eso al final pasa factura en el humor y ánimos del resto.


3) Tiempo libre

Es conveniente dejar algún rato libre durante el viaje. Que todo vaya organizado y que el grupo hagas sus visitas en conjunto está muy bien, nada como viajar en grupo para obtener algún descuento en las entradas del algún monumento o algún beneficio a la hora de acceder a un lugar, pero a la hora de realizar compras o tomar un café es interesante que cada uno tenga su momento, por eso disfrutar de alguna tarde o mañana libre será lo idóneo para reengancharse al grupo con ánimos renovados.

Nada como la organización, la planificación y las buenas intenciones por parte de los miembros del grupo para que el viaje salga a pedir de boca.