Con muy buen estilo, la casa está ubicada en un lugar tranquilo a 15 min de Perpiñán y a 20 min del mar y de España. La aldea tiene una panadería, un bar-restaurante y una gran variedad de comercios y servicios cercanos a la ciudad de Thuir situada a 3 kilómetros.
Construida en 1914 y renovada con buen gusto, esta casa antigua de viticultores es el lugar idóneo para dos familias, (10 camas, 5 dormitorios distribuidos en dos plantas, cuarto de baño y aseos en cada nivel). En la planta baja, podrás disfrutar de la frescura de la sala de estar con vista a un jardín cercado y a diversos árboles (albaricoquero, higuera, naranjo, limonero y tilo). Podrás comer a la sombra de la parra moscatel o bajo un techo de canisse.
Te deleitarás con su ubicación privilegiada al pie del macizo del Canigó. Los amantes de los senderos podrán disfrutar de diversos recorridos a pie o en bicicleta a la salida de la propiedad.
La casa rural está ubicada en medio de los Aspres, una región de viñedos extraordinarios.
Hemos escogido los mejores destinos que no podrás dejar de visitar, los encuentros con los viticultores, las degustaciones y en temporada alta, conciertos y espectáculos.
Además, podrás disfrutar del ambiente en los mercados tradicionales y comprar frutas y legumbres directamente a los productores locales.
Algunos lugares patrimoniales a menos de 30 minutos que no puedes perderte: las cavas Byrrh, la abadía de San Martín de Canigón, el priorato de Serrabona, Marcevol o San Miguel de Cuixá, el Palacio de los Reyes de Mallorca y el sector protegido de Perpiñán, así como también, los baños termales de Santo Tomás, Colliure, el Museo de Arte Moderno de Céret, la ciudad fortificada de Villefranche de Conflent construida por Vauban y declarada patrimonio mundial de la UNESCO.