Esta adorable cabaña al otro lado de la calle del bar Tikki pasó de descuidada a cuidada, y se ha convertido en una pequeña joya en la isla. Si te gusta ver a la gente, hay acción que pasa todo el día. El acceso a la playa está justo al otro lado de la calle y 2 casas más (a unos 100 metros). Tiene un techo de coppertop, todo el nuevo revestimiento de vinilo y un porche envolvente que se proyecta, para que la gente pueda ver o disfrutar relajándose en los 2 sofás de mimbre. Las habitaciones cuentan con una cama doble cada una, además de un sofá cama. Las paredes de la sala de estar tienen armamento, la cocina tiene estantes flotantes con azulejos del metro y los baños tienen tablas de cuentas, tocadores nuevos y una lavadora-secadora grande. Tienes todo para estacionar autos, camionetas, botes, lo que sea. Lo mejor es que el bar Ocean Grille y Tikki tiene un muelle con un restaurante frente al mar y está a solo unos pasos de distancia. Los jueves por la noche siempre hay música en vivo antes de los fuegos artificiales, y puedes verlos desde el porche o pasar el rato en la playa.