Apartamento en el primer piso, ideal para parejas y familias, Arsenale / Biennale

Locazione Turistica - CIR n. 027042-LOC-00938

Descripción - El apartamento CRÈME CARAMEL se halla en el Sestiere Castello y está amueblado con elegancia, sentido práctico y buen gusto. En todos los detalles se nota la constante atención de los propietarios en crear un ambiente acogedor y equipado con todos los conforts, de manera que los huéspedes se sientan como en su propia casa. Crème Caramel se encuentra en la primera planta de una finca completamente renovada en una pintoresca calle veneciana cerca del Canal Grande: la calle de la Vida. Se compone de una amplia cocina-sala de estar, con un cómodo sofá que se puede convertir en dos camas separadas o en una cama de matrimonio, además de una habitación con cama de matrimonio y un baño. Es el apartamento ideal para una familia o para una o dos parejas que quieran pasar sus vacaciones en Venecia. El barrio se abre hacia el maravilloso dique de San Marco y es muy característico: muy cerca se encuentran la animada Via Garibaldi con su mercado de pescado, fruta y hortalizas, y las tiendas más bonitas del centro, con grandes firmas al lado de las pequeñas tiendas artesanas. Podrán elegir un restaurante distinto cada día entre las varias opciones de la zona, o bien comprar productos típicos en alguna tienda de comestibles si prefieren cocinar en casa. La cocina está perfectamente equipada de acuerdo con la gran tradición de la cocina italiana. El apartamento incluye todos los servicios: lavavajillas, aire acondicionado, TV satélite LCD, reproductor DVD-MP3, conexión a internet, microondas, lavadora, cafetera americana e italiana, tostadora, secador de pelo, plancha, calefacción individual, caja de seguridad.

Ubicación - Se encuentra así, en el corazón de la ciudad,en el barrio de S.Marcos, justo al límite con el barrio de Castello, de este modo junta las características de los dos barrios ,la mondanidad de S. Marco con sus boutiques, desde Armani, Cartier, D&G y muchas más, y con sus tiendas de vidrio y sus restaurantes, y muy populares, los típicos mercados de fruta y pescado de Castello y sus rincones particulares, las dos caras de una ciudad poliédrica y sin tiempo.