Casa rústica en medio del bosque atlántico, con impresionantes vistas a la playa, rodeada de naturaleza, con pájaros y plantas, junto a una cascada con piscina natural privada, dentro de la propiedad. Atención: desde el estacionamiento hasta la casa hay un sendero cuesta arriba de aproximadamente 120 metros, nuestro espacio no está recomendado para personas con movilidad limitada. Mejor llegar de día. Debido a que está cerca del bosque, pueden ocurrir insectos, como hormigas, mosquitos, etc.