Hemos pasado un fin de semana accidentado, bien por mala suerte, bien por falta de planificación del propietario.
- La primera noche se fue la luz a las 5 de la mañana, por lo que las luces de emergencia se encendieron pareciendo que estabas dormido a plena luz del día. Tardó como unos 40 minutos en venir, y supongo que fué algo general del pueblo.
- Al día siguiente de la primera noche nos levantamos sin agua en la casa, avería que afectó a todo el pueblo
- El depósito de contingencia de la casa no funcionó porque estaba vacío, por lo que no nos pudimos duchar en toda la mañana. Aparte os podreis imaginar el problema añadido que las cisternas del wc, una vez usadas no se volvían a cargar...
- Entre visitas del fontanero, de la encargada de la casa, de algún vecino y demás la intimidad que tuvimos fué mínima. Además, la doble avería nos impidió salir de la cas antes de la 13:00, limitando nuestro tiempo para hacer turismo por la zona.
- Despues de una segunda noche algo más "normal" nos levantamos y la sorpresa fue que el gas de la caldera se había acabado, por lo que nuevamente hubo que llamar a la encargada porque habiendo agua, no nos podíamos duchar (nuevamente). También nuevamente se produjeron un par de visitas de la encargada que limitaron nuestra intimidad de estar tranquilos en la casa
- Durante todo el fin de semana una cisterna (la del dormitorio con cama de matrimonio) no funcionó, por lo que teníamos que llenarla con la manguera de la ducha
- Siendo 9 adultos alojados en la casa, en el salón solo hay 6 plazas de asientos, teniendo que estar sentados algunos en el suelo o arrastrando sillas
- Parte del menaje se podría cambiar por algo más nuevo. Las sartenes tenías el teflón levantado suponiendo un riesgo cocinar con ellas.
- Con solo una carga de leña (ya estabamos avisados) es necesario comprar más, pero el telefono proporcionado pertenece a un señor que ya no la vende.
Mala estancia, apta para gente conformista.