Nosotros viajamos en familia de tres generaciones y pasamos tiempo en la casa porque es muy cómoda y tiene todos los detalles que puedes necesitar para disfrutar de unos días de vacaciones.
Cocina completa y vajilla extensa, no falta de nada.
El pueblo perfecto y se valora el silencio para descansar.
La anfitriona muy amable, nos dio la bienvenida y nos informó de todas las rutas para las excursiones.
Habla español y se agradece.