Han sido unas vacaciones en pareja estupendas, mucha tranquilidad y privacidad, un entorno precioso, Cintia es súper amable y servicial. El acceso en un principio es un poquito incómodo ya que son unos 3 kms de camino forestal hasta llegar al hotel, pero es normal estando en un parque natural. Nuestro apartamento , el Ático, tenía un terraza maravillosa y enorme ,por ello nos decidimos a reservarlo, hay que tener en cuenta los insectos, abispas..estamos en plena naturaleza, la casa tiene mosquiteras en todas las ventanas, la piscina es estupenda. Lo recomendamos 100%