La casa está parcialmente renovada y nos ha gustado lo acogedora y práctica que es. Perfecta para unas vacaciones en familia o con amigos. Pero, sobre todo, para disfrutar de la tranquilidad y que sean unas auténticas vacaciones alejados del mundanal ruido. Aunque hay que bajar a la playa en coche, está a 5 minutos. La piscina es un plus y el amplio jardín hace quieras disfrutar de cada momento allí. Además, la calle está cortada, con lo que la tranquilidad está aaegurada. Por ponerle una pega, la zona del aparcamiento es limitada, sobre todo si llevas un coche grande/largo.
Aún así, totalmente recomendable y seguro que repetiremos.