Conoce los campos de amapolas en flor durante los meses de abril y septiembre
Los campos de amapolas dotan de color a grandes extensiones de tierra en nuestro país. De hecho, España es, tras Australia, el segundo productor mundial de la también conocida como adormidera con un total de 13.000 hectáreas de impactante belleza autorizadas por el Ministerio de Sanidad, ya que el cultivo de la amapola de opio está totalmente legalizado en nuestro país siempre que su uso sea medicinal.
Además de estas extensiones autorizadas, las amapolas crecen de manera natural en zonas concretas como campos, prados, bancales o barrancos. Aunque la variedad más común es la amapola roja también podrás encontrar otros colores como naranja, violeta, amarillo o blanco. Se trata de una flor que puede llegar a superar el metro de altura según la variedad. Su proceso de floración tiene lugar en dos fases a lo largo del año. Tanto a principio de abril como al iniciar el mes de septiembre tiene lugar la floración de la amapola en la que ven la luz los primeros pétalos de esta flor ya sea de color rojo, rosa, blanco, naranja o amarillo.
Sus hojas crecen de forma alterna a lo largo del tallo y son alargadas y con bordes dentados, y cada flor puede tener entre 4 y 6 pétalos que en su interior contienen infinidad de estambres que al polinizar lanzan cientos de semillas que serán las que acabarán poblando zonas muy concretas. Zonas que se caracterizan por el frío y los grandes cambios de temperatura, esto es debido a que la amapola es una planta de gran resistencia y que apenas necesita cuidados, lo cual es un enorme incentivo para que se siembren y se reproduzcan ellas mismas.
Campos de amapola en España
Polan
La localidad de Polán se encuentra en la provincia de Toledo. Un pueblo a descubrir por innumerables motivos. Su enorme castillo medieval del siglo XI que pese a estar en ruinas conserva su esencia inicial, su Iglesia de San Pablo y San Pedro de estilo barroco y rococó, respectivamente, sus populares fiestas de la Candelaria en Febrero… Sin embargo, una de las historias de este municipio de poco más de 4.000 habitantes tiene como protagonista a las amapolas.
Polán ha revitalizado su actividad económica, en declive tras la crisis económica, gracias al cultivo de la amapola. En la afueras de la localidad existen más de 40 hectáreas de campos de amapolas que podréis disfrutar en vuestra visita al municipio, no sin antes tener que cruzar la población y adentraros por estrechas sendas para casa al final del túnel descubrir un estallido de luz y de color en forma de decenas de hectáreas de amapolas.
Treviño y los Valles Alaveses
Otro de los campos de amapola que se tiñen de color malva en la geografía española se encuentran en varios puntos de la geografía alavesa y de la localidad de Treviño, ya en la provincia de Burgos. En tu vista a esta zona encontrarás auténticos mares de amapolas que florecen a principios de abril y en septiembre.
Agricultores de la Llanada y los Valles Alaveses destinan al cultivo de las amapolas un total de 80 hectáreas, mientras que en Treviño hay alrededor de 200 hectáreas. La experiencia de este cultivo acumula ya unos cuatro años, así que podrás disfrutar de la experiencia de disfrutar de estas increíbles extensiones de color malva en tu viaje hasta el norte de España.
Casas rurales cerca del Condado de Treviño >
Valle de Tobalina
Cerca del destino anterior se encuentra otra de las mecas para disfrutar de la floración de las amapolas. Este valle forma una franja triangular de las montañas de Burgos, que se ensancha de este a oeste, y que comprende el espacio que queda libre la sierra de la Arcena y la de la Llana-Obarenes. El llamado antiguamente Fondón de Tobalina se encuentra atenazado por la unión de ambas cordilleras en el desfiladero de Sobrón. Es aquí donde encontrarás laderas inundadas de amapolas.
Casas rurales en el Valle de la Tobalina >
La Bureba
También muy cerca del Valle de la Tobalina se encuentra la comarca de La Bureba, famosa, además de las amapolas, por sus enormes extensiones de girasoles. La ruta por los campos de amapolas comienza en uno de los lugares más reconocidos para disfrutarlos en Españas como es esta comarca ubicada al norte de la provincia de Burgos.
Os recomendamos introduciros en lo más profundo de estos campos y no os quedéis en la orilla de las carreteras. Dentro de estos caminos sin asfaltar de gravilla o tierra podréis disfrutar de extensos mantos rojos formados por amapolas. Adentrándote aquí encontrarás miradores y cunetas desde los que capturar increíbles fotografías bajo el intenso sol de La Bureba.