La casa increíble, desde el momento en que llegamos no dejo de sorprendernos. Está aislada, aportando calma, a la vez que bien posicionada, cerca de Ronda, Olvera, Sevilla... El interior es amplio, en ningún momento hubo problema de espacio, camas de sobra, dos salones, baños... . La mejor parte de la casa se la lleva el exterior, con la piscina, las mesas de exterior, las flores... Carlos, el dueño, estuvo prestándonos su ayuda desde el principio, fue nuestro descubrimiento del viaje, una persona increíble. Hemos vivido una experiencia inolvidable, la cual volveremos a repetir 100%