Hemos estado dos semanas y fenomenal. La casa es preciosa y tiene todas las comodidades. Los únicos inconvenientes son que no puedes aparcar en la calle (es solo para residentes), aunque tienes un párking muy cerca y el aire acondicionado del vecino que cuando lo pone se oye mucho. Además Artà es muy tranquilo y es una localización ideal para conocer la isla.