Este fin de semana hemos estado alojados un grupo de amigos con 4 niños pequeños (14 personas en total), y desde luego ha sido una sorpresa muy agradable. Para empezar, las fotos no hacen justicia al alojamiento. Es mucho más grande de lo que parece en las fotos, y mucho más bonito y luminoso. La televisión del salón la han cambiado, y ahora es una mucho más grande.
Casi todo el tiempo estuvimos en el salón, y se agradece que haya sillones tan grandes donde podíamos estar cómodamente.
Todas las habitaciones tienen baño propio. Hay además dos camas supletorias allí mismo (en el anuncio pone que hay una, pero en realidad hay dos). No cocinamos prácticamente nada, ya que lo llevábamos todo hecho, pero encontramos en la cocina todos los utensilios que necesitamos. Es una cocina preciosa, con una abertura que da al salón que hace muy agradable poder estar gente en el comedor, y otros en la cocina, completamente comunicados. Además, tiene 2 neveras, muy útil.
Las dos o tres veces que tuve que contactar con la dueña, Gloria antes de ir al alojamiento para preguntarle dudas estuvo disponible al momento, y no encontramos ningún problema, siempre fue muy atenta y amable.
El sábado hizo buen tiempo, así que aprovechamos para ir a Segóbriga, que está a unos 15 min en coche: muy recomendable la visita guiada. Pero el domingo no paró de llover, así que no nos importó no salir de casa, ya que se estaba muy agradable con la chimenea.
En fin: un fin de semana perfecto, y una casa altamente recomendable, para ir en grupo, tanto si vas con niños como si no.